Como
educadora, el video de la UNESCO me ha hecho reflexionar profundamente sobre mi
práctica docente.
La pregunta que plantea sobre si influye más en nosotros el aprendizaje virtual
o la escuela es sumamente pertinente en el mundo en el que vivimos.
El video me
ha llevado a cuestionar la forma en que diseño mis clases. ¿Estoy realmente
preparando a mis estudiantes para navegar en un mar de información, donde las
noticias falsas y las teorías de conspiración compiten por su atención? ¿Estoy
fomentando un pensamiento crítico que les permita evaluar las fuentes de
información y construir su propio conocimiento?
La
influencia de las redes sociales y las plataformas digitales en nuestros
estudiantes es innegable. Como docentes, tenemos el desafío de integrar estas
herramientas en nuestras prácticas pedagógicas de manera crítica y reflexiva.
Debemos enseñar a nuestros estudiantes a ser consumidores de información
responsables, capaces de distinguir entre lo verdadero y lo falso.
Este video
me ha recordado que mi rol va más allá de transmitir conocimientos. Soy un guía
que debe acompañar a mis estudiantes en su proceso de aprendizaje, ayudándoles
a desarrollar las competencias necesarias para enfrentar los desafíos del siglo
XXI. Esto implica, entre otras cosas, fomentar la curiosidad, el pensamiento
crítico, la colaboración y la creatividad.
En mi
práctica diaria, me propongo:
- Incorporar las tecnologías
digitales en el aula de manera pedagógica: Utilizar las herramientas digitales no
solo como un medio para transmitir información, sino como un espacio para
la interacción, la colaboración y la creación.
- Fomentar el pensamiento
crítico:
Proponer actividades que desafíen a los estudiantes a analizar la
información de manera crítica, a identificar sesgos y a construir
argumentos sólidos.
- Desarrollar la alfabetización
digital:
Enseñar a los estudiantes a evaluar la fiabilidad de las fuentes de
información, a identificar las noticias falsas y a utilizar las
herramientas digitales de manera responsable.
- Crear un ambiente de
aprendizaje colaborativo: Fomentar el trabajo en equipo y la discusión de ideas, para que
los estudiantes aprendan unos de otros y desarrollen habilidades sociales.
Creo que el
video de la UNESCO es una llamada a la acción para todos los educadores. Es
hora de repensar nuestras prácticas y de adaptarnos a un mundo en constante
cambio.